Nació con el cordón umbilical rodeándole el cuerpo y perdió parte del brazo izquierdo · Es un gran taponador, rápido y quiere llegar a lo más alto · Ha tenido dos ofertas de División III, pero quiere más
KEVIN LAUE, QUE PERDIÓ LA MANO AL NACER, JUEGA EN UNA ACADEMIA MILITAR
Cuando a Kevin Leue le preguntaban qué le había ocurrido en el brazo izquierdo, que está amputado por debajo del codo, había respondido tantas veces que decidió inventarse una historia: "Ocurrió en una isla de Hawaii, el 15 de abril de 1995, dos días después de mi cumpleaños. Estaba haciendo surf y un tiburón me mordió", decía, hasta que la cara de asombro de sus interlocutores le obligaba a decir la verdad: "Es broma". En realidad, Laue nació con el cordón umbilical enrollado a su cuerpo y con el brazo en medio.
Su madre le sugirió que, cuando le preguntaran, dijera que le había comido el brazo un tiburón
La invención del cuento es una anécdota que explica claramente el carácter de Laue. Nunca se le ha puesto nada por delante, ni a él ni a sus padres. De hecho, la madre, Jodi, sugirió lo del tiburón. Igual que le animó a que jugara al baloncesto con los chicos de su edad. Y no sólo era uno más: en octavo curso ya machacaba el aro, algo que no hacía nadie en su clase.
En el instituto Amador Valley, en California, maravilló. Era alto y rapidísimo. En un partido puso 20 tapones. En otro, anotó una canasta en el último segundo contra el rival local, Foothill. Todo el mundo hablaba de aquella jugada en la que taponó, cruzó corriendo la cancha y machacó. "Es difícil para él porque no puede botar con la izquierda, pero en América no hay muchos chicos que intimiden y corran como él con su estatura", declaraba su entrenador, Rob Collins, que le auguraba una beca en alguna universidad de la Division II de la NCAA.
En un partido de instituto puso 20 taopnes y George Bush fue a visitarlo
Su popularidad creció en San Francisco. Tanto, que en un viaje del ex presidente George Bush a California para reunirse con el gobernador Arnold Schwarzenegger pidió visitar a Laue.
Sin embargo, en su último año de instituto se rompió una pierna y se quedó sin ofertas de grandes universidades tras un año en blanco. Se enroló en la Fort Union Military Academy, una 'prep school' (una especie de academia pre-universitaria que prepara a futuros alumnos de 'colleges'), donde espera ofertas de becas de buenas universidades. Ha tenido dos de División III, pero quiere más. Promedia 6,9 puntos y 7,4 rebotes en un equipo ganador. Y eso que el entrenador, Fletcher Arritt, no lo quería en el equipo. "Dije que ya tenía bastantes problemas con chicos con dos manos. Pero vino, probó y todos lo queríamos en el equipo", señala.
Dave Telep, un analista del basket colegial estadounidense, declaraba al 'New York Times' que Laue sería claramente un jugador de División I si tuviera dos manos. Con su discapacidad, quizá logre una beca en una buena universidad. Lo que nadie podrá negar entonces es que Kevin Laue lo merece más que nadie.
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